
El estanque del templo Kinkaku-ji con el pabellón dorado de fondo.
EN NUESTRO quinto DÍA POR OSAKA decidimos volver a kioto para visitar los lugares que nos faltaron por ver en nuestro tercer día:
- Alucinamos con el Templo Dorado (Kinkaku-ji), sin ninguna duda uno de los templos más bonitos de todo Japón.
- El resto del día nos dedicamos a patear todas las callejuelas del barrio de Gion en busca de una geisha.
En nuestro quinto día por Japón volvimos a Kioto, nos quedamos con ganas de más depués de pasar nuestro tercer día viendo Fushimi Inari y Kiyomizu-dera, además nos faltaba dos de las atracciones turísticas más importantes de Kioto, dos imprescindibles que no podíamos perdernos, el famoso Templo Dorado (Kinkaku-ji) y el barrio más famoso de todo Kioto, Gion, donde intentaremos encontrar alguna geisha y maiko (aprendiz de geisha).
Como todos los días anteriores nuestro punto de partida fue la estación Shin-Osaka de Jr, con dirección la estación de Kioto (14 minutos), al llegar a la estación de Kyoto salimos fuera a la zona de las paradas de autobuses y allí cogimos el autobús número 205 hasta kinkakuji-michi, la parada de bus del Templo Dorado, el trayecto dura más de 30 minutos. Al bajarnos del bus, cruzamos de acera y tomamos la calle Nishioji Dori hacia la izquierda para tomar la tercera calle a la derecha, Kurama-guchi Dori, andamos unos 100 metros y llegamos a la entrada de un gran parque donde se encuentra el templo Kinkaku-ji.
El templo Kinkaku-ji o Rokouon-ji es conocido popularmente como el Pabellón Dorado es uno de los monumentos más famosos de Kioto, situado al noroeste de la ciudad fue construido en 1397 y declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1994. Fue levantado como villa de descanso del comandante militar o "shogun" Ashikaga Yoshimitsu. El recinto está formado por un templo de tres plantas, cuyas dos plantas superiores están recubiertas de pan de oro y un precioso jardín japonés con un estanque central refleja los tonos dorados de sus paredes creando una foto difícil de olvidar, la primera planta del edificio está pintada de blanco y con una estructura de madera refleja el estilo japonés shinden-zukuri propio del periodo Heian (794-1185), también podemos observar la figura de un ave fénix en lo alto del tejado. El templo actualmente funciona como shariden, guardando las reliquias de Buda. Como curiosidad el templo fue quemado en 1950 por un monje que padecía de todas sus facultades mentales, por lo que en 1955 se reconstruyó nuevamente.
Obviamente al ser uno de los templos mas visitados durante todo el año lo mejor es visitarlo a primera hora de la mañana o a última hora de la tarde antes de que cierren. A la salida del templo hay varias tiendas de recuerdos y un pequeño puesto de té para descansar un rato y disfrutar de las vistas de los jardines. El templo Kinkaku-ji abre todos los días de la semana de 9:00 a 17:00 y su entrada cuesta 400 yenes (3,10 euros aproximadamente).
Ya era media mañana y decidimos ir a comer al famoso barrio Gion y pasar la tarde en busca de Geishas y paseando por sus preciosas callejuelas, para ello volvimos a la parada de bus kinkakuji-michi (donde nos bajamos para llegar al Templo Dorado), allí cogeremos el bus número 12 para bajarnos en la parada Higashiyama Sanjo. Cuando nos bajamos caminamos hacia la izquierda unos 100 metros hasta tomar la calle perpendicular hanamikoji Dori (una de las calles principales del barrio de Gion), y ya estábamos de lleno en el increíble barrio de de las geishas.
Gion es el barrio más popular de todo Kioto y uno de los más turísticos de todo Japón, conocido por ser el barrio de geishas más famoso del país. En sus orígenes estaba repleto de casas de té que servían de descanso a los numerosos viajeros que se dirigían a los templos de la zona. A principios de la década de 1880 Gion se dividió en dos: Gion Otsubu y Gion Kobu. La zona de Kobu situada al sur de la calle Hanamikoji sigue repleta de casas de té y restaurantes típicos del siglo XVIII. Si queréis probar suerte a encontrar una geisha o una maiko mientras dais un precioso paseo recordando imágenes de la maravillosa película Memorias de una Geisha, este es vuestro lugar, nosotros nos pasamos varias horas buscando alguna y tenemos que decir que desgraciadamente no vimos ninguna, pero nos encontramos con varios españoles que nos dijeron que si las habían conseguido ver. Una de las calles más espectaculares y bonitas de todo Kyoto y de las que más nos gusto en nuestro viaje por todo el país fue Shirakawa Minami-dori, una calle totalmente empedrada y flanqueada por un riachuelo y algún puente de piedra y madera que nos hicieron transportarnos por completo al Japón tradicional. Pero Gion es mucho más, no dudéis en perderos por sus calles, parar en alguna casa de té, cenar en alguno de los restaurantes que dan al río, disfrutar una tarde en esta zona, no os arrepentiréis.
Después de cenar tomamos el autobús 206 con destino la estación de JR de Kioto y de allí en tren a nuestra parada Shin-Osaka (14 minutos). En nuestro siguiente post te contamos nuestro sexto día en tierras japonesas, el cual dividimos en dos partes, por la mañana visitamos Himeji y el castillo de la Grulla Blanca y por la tarde nos desplazamos en tren hasta nuestra siguiente ciudad base, Tokio. Así como donde nos hospedamos en la capital del país y nuestras primeras impresiones de esta gigantesca ciudad. ¿Nos acompañas?
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